Lavarse las manos resulta sumamente importante en función de nuestra salud y bienestar. Ocurre que esta labor representa la primera barrera contra los gérmenes, bacterias y virus que pueden llegar a afectar nuestro organismo, ahí radica su importancia. Además de rescatar la trascendencia de realizar asiduamente esta actividad, vamos a contarte de qué manera hacerlo correctamente.
La primera línea de defensa contra los gérmenes es sin lugar a duda lavarse bien las manos. Estos organismos perjudiciales para nuestra salud pueden transmitirse de muchas maneras pero vale decir que en la mayoría de los casos lo hacen por intermedio de manos que se encuentran sucias. Lavarse las manos y hacerlo de forma adecuada es entonces una actividad que debemos realizar con frecuencia diaria.
Como primera línea de defensa en relación a los gérmenes, son muchas las afecciones de las que nos previene lavarnos bien las manos. Además de un simple resfriado, la meningitis y bronquitis también pueden ser contagiadas por una mano sucia, al igual que la hepatitis y la mayoría de los tipos de diarrea infecciosa.
Acerca de cómo lavarse correctamente las manos
No es en vano aquí compartir algunas pautas que hacen al buen lavado de las manos. Vale la pena prestar atención y seguir estos postulados, de esta manera reconoceremos los innumerables beneficios que podrá aportarnos lavarnos las manos de manera correcta.
- Lavarse con agua tibia: el agua tibia ayuda a remover mejor las bacterias y por eso se recomienda en detrimento del agua fría. Para lavar las manos de niños pequeños, debemos estar seguros que la temperatura no resulte alta ni atente contra su piel.
- Utilizar jabón: puede resultar obvio pero en ocasiones algunas personas olvidan que deben ponerse jabón para lavarse bien las manos. El mismo debe ser frotado por sobre toda la piel de nuestras manos y este proceso no debe durar menos de 20 segundos.
- Enjuagarse las manos: luego de lavar bien las manos no debemos dejar que quede humedad en las mismas. Una toalla sumamente limpia y seca es indispensable, y nos permitirá realizar este proceso correctamente.
Por último, estos son los momentos en que resulta sumamente importante que te laves las manos.
- antes y después de comer y cocinar
- después de ir al baño
- después de entrar en contacto con animales
- después de sonarse la nariz, toser o estornudar
- después de entrar al hogar cuando venimos de la calle
