Tipos de T.O.C. ¿Cómo es vivir con T.O.C.? (Parte 3)

tipos de T.O.C.

Continuando con las diferentes categorías o tipos de T.O.C., nos dirigimos a los que (dentro del trastorno) se denominan como:

Canalizar la angustia que produce el ansia y la desazón, convierte a los afligidos de este trastorno en artistas de sus propios problemas; realizan cosas tan extrañas con sus vidas, que pueden ser impresionantes para algunos, pero aberrantes para otros. En cualquier caso, siempre serán lo que son, por culpa y juicio de su trastorno.

Si bien el orden en general se trata de ciertos patrones en común en los tipos de T.O.C., que reúnen aspectos como: que las camisas estén junto con las camisas. Que un cuadro colgado en la pared esté paralelo con el horizonte. O que al trazar una línea sea lo más recta posible.

En el orden existe una mínima tendencia a la perfección, pero solo mínima. Cuando se salta la barrera y se cruza hacia el otro lado, podemos encontrarnos con aquellos obsesivos compulsivos caracterizados por el orden y el perfeccionismo.

Podemos ver que ellos generalmente adoptan un comportamiento rígido en cuanto al sistema de orden. Por ejemplo, que los distintos adornos de un aparador se encuentren ubicados en ángulo recto con respecto el uno del otro.

El espacio que existe entre cada objeto siempre es paralelo y adyacente. Los límites de un aparador deben coincidir con la línea que traza la cerámica del piso. La ropa guardada y doblada casi que dibujan formas geométricas. Incluso también estas conductas pueden verse aplicadas en el uso de software. La organización de los íconos del escritorio, que todas las opciones estén perfectamente configuradas, o no soportar errores de ortografía propios o de terceros en las conversaciones de chat.

Si los elementos que deberían estar ordenados no lo están, comenzarán los ataques de pensamientos obsesivos y el aumento de los niveles de ansiedad

En otras palabras, el desorden causa pánico y con urgencia se recurre a la supresión de ese pánico. Ordenando milimétricamente cada detalle que crea necesario como correcto para sentirse satisfecho.

Esta tarea puede presentarse de la nada. Entrar a un restaurante y ver en la mesa los cubiertos, vasos y servilletas, puede ser un propósito para ponerse a ordenar a la perfección cada detalle presente en la mesa.

Pero por supuesto, la persona está expuesta a que sus conductas extrañas sean vistas por los demás. Que es un aspecto muy importante para la persona afectada, porque deteriora su moral. Al sentirse como un “extraño” o “raro” hacia sus terceros. De aquí que muchas veces se las ingenien para ocultar sus comportamientos estructurados.

El orden, la rigidez, la perfección, las ideas de que algo esté o no en su orden son aspectos que también se pueden dirigir hacia la persona misma. Hablamos de su cuerpo, su imagen, pero en este caso no específicamente de su estructura física. Pues esa afección está dentro de otra categoría.

Se conduce a apartados como el aseo o cuidado de la imagen, como en el caso de cortarse las uñas. Algo tan simple puede ser completamente pervertido, porque las uñas deben estar simétricamente cortadas y talladas según la forma del dedo.

Es casi como ser un escultor, es odiar que te crezcan las uñas porque nuevamente te espera una tarea tediosa. Si no se hace como lo dicta la mente, solo se espera mal estar.

Lamentablemente tales sujetos afectados por tan drásticas y extrañas anomalías de la mente, convierten a la vida cotidiana, en un total desafío. Tanto como para cortarse las uñas, como para ordenar sus cosas.

Califique este post

Por favor, ¡Comparte!

Preguntas y respuestas + populares

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *