¿Por qué nos reímos (hasta no poder) cuando recibimos cosquillas? y ¿Hay una explicación evolutiva para ello?
En realidad las cosquillas son un tema muy, muy serio. Los científicos las toman muy en serio. Recientemente, los científicos estudiaron 30 voluntarios en un escáner de resonancia magnética para tratar de llegar al fondo de este fenómeno de cosquilleo y el por qué nos resulta tan divertido y tan entretenido. Es algo que tiene que ver con nosotros, que no se esperaba, algo que no estamos prediciendo que va a suceder y no estamos seguros de cómo se va a sentir o cómo una persona va a hacernos cosquillas. Por lo tanto, a la gente que escaneó mientras recibían cosquillas o que se les decía una broma, resultó que el opérculo rolándico, un área del cerebro que está implicada en los movimientos faciales y reacciones emocionales se ilumina, tanto a las cosquillas como al esuchar una broma. Pero también hay un área adicional del cerebro que se ilumina cuando los pies de las personas reciben cosquillas (los pies están afuera del escáner) y ese es el hipotálamo, lo cual resulta interesante.
Ahora, el hipotálamo está implicado en la regulación de las sensaciones de hambre, el cansancio y la temperatura corporal, y también está involucrado en las respuestas de lucha o huida. Por lo tanto, si tienes miedo, es posible que desees luchar con alguien o huir. Así que sí, las cosquillas parecen provocar también estos sentimientos en la gente y estamos tratando de entender. Los científicos están tratando de entender un poco más acerca de lo que sucede en las cosquillas. Parece que es una respuesta innata de risa a las cosquillas. Por lo tanto, los bebés recién nacidos, si reciben cosquillas de un padre con una cara muy seria, igualmente van a empezar a reír. Por lo tanto, es algo que hemos evolucionado para hacer y todavía estamos tratando de comprender exactamente.